lunes, 2 de febrero de 2015

EL DÍA EN QUE EL SANTANDER COMPRÓ LAS PORTADAS

Tercera Información, 31/01/2015

La publicidad “portada” del Banco de Santander que, el pasado miércoles, insertaron casi todos los diarios tradicionales ha provocado un alud de críticas y abierto el debate en las redes.



El periodista Sergi Picazo inicia su artículo en el digital “elcritic.cat” de hoy con esta evocación de Mark Twain “Gracias a Dios en nuestro país tenemos tres cosas preciosas: la libertad de expresión, la libertad de pensamiento y la prudencia de no practicar nunca ninguna de las dos.

El artículo gira en torno a la publicidad del Banco de Santander que, el pasado miércoles, acompañó como falsa portada a casi todos los diarios generalistas y que provocó un alud de críticas y correspondientes respuestas en las redes por parte de algunos medios.

Picazo entra a ese debate señalado que “El problema de las portadas con el anuncio del Banco Santander en la prensa no es sólo la publicidad. ¿No veis que es un problema de credibilidad de la prensa? El problema, pues, no es que todas las portadas traigan el mismo anuncio del Banco Santander. ¿Alguien creía que la prensa era independiente hasta miércoles y entonces lo dejó de ser para tener un anuncio? No. Si la publicidad consigue influir y esto hace que la mayoría de diarios, el día que muerto Emilio Botín, publiquen panegíricos significaría que tenemos un problema Porque el problema, para mí, es cuando todas las portadas traen el mismo titular”.

El periodista sostiene que “mi hipótesis es que la gente ha perdido la confianza (en los medios) porque cree que la engañan, que no le dicen toda la verdad, que están demasiado influidos por los intereses de un partido político o porque no acostumbran a tener un punto de vista crítico con el poder económico. La gente ha igualado a políticos y periodistas. ve una connivencia. Porque, si la prensa es libre ¿por qué no ejerce de cuarto poder?

En Cataluña, no existe la censura tal y como la entendíamos bajo un régimen dictatorial. Pero existen dos cosas peores: la censura soft -censura blanda- y, cuando esta falla, la autocensura . Algunos periodistas que hoy trabajan en los medios de comunicación, que denominamos “periodistas brecha”, se enfrentan a la censura moderna cada día. A veces ganan, a veces pierden”. Más adelante señala, “Creo que vivimos el mejor momento para hacer periodismo de los últimos treinta años -gracias a las nuevas tecnologías e Internet y el despertar crítico de la ciudadanía- pero, lamentablemente, los grandes medios de comunicación viven su peor momento -económico, crisis del papel, despidos, falta de rumbo- de los últimos treinta años.

Las profesiones de juez y periodista son las peores valoradas por los españoles, según un barómetro del Centre de Investigaciones Sociológicas del 2013. Al frente, y como profesión más muy valorada, se colocaba la de médico y la de profesor. Algo estaremos haciendo mal los periodistas porque nuestra profesión esté entre las peores valoradas.” Sergi Picazo concluye aportando las causa de las prácticas habituales de distorsión de la información en los grandes medios.